Por fin!!! Ya me han dado las "vacaciones", pero bueno no son vacaciones en realidad es más tiempo para estudiar porque no tengo clases, las vacaciones de verdad serán la semana que tengo desde que termino los exámenes hasta que empiece las clases.
El caso es que para celebrarlo hoy me he tomado el día libre y he dicho voy a hacer los panes que llevo meses diciendo que voy a hacer. Cada vez que cojo el libro de panes digo voy a hacer estos, pero al final nunca los hago porque hacer pan se lleva taaaaaaanto tiempo. Así que hoy por fin me he puesto y aquí los tengo recién sacados del horno (bueno ya se habían enfriado, pero están recién hechos).
Por cierto la receta la he sacado del libro de pan de Xavier Barriga es la segunda receta que pruebo del libro y me han salido las dos taaaan ricas que cuando vuelva a tener tiempo probaré otra nueva. Si os preguntáis por la primera receta que hice todavía no la he publicado pero dentro de poco os enseñaré como me quedaron esos panes.
Los ingredientes
- 500 g de harina panificable
- 50 g de harina de almendras tostada
- 300 ml de agua
- 10 g de levadura de panadero
- 50 g de orejones
- 10 g de sal
- vainilla
- almendras fileteadas y azúcar glas para decorar
Elaboración
Lo primero es mezclar la harina con el agua, la sal, y la vainilla. Cuando ya lo hemos mezclado todo bien empezamos con el amasado. Os explicaría como es el proceso de amasado, pero creo que no voy a ser capaz así que mejor lo veis vosotros aquí, parece difícil pero os aseguro que después de ver el vídeo unas cinco veces antes de ponerte a hacer el pan al final te sale solo.
Yo para este pan he hecho cuatro descansos antes de añadir la levadura, y después dos más. Por último he añadido los orejones en trocitos lo he amasado de nuevo y he dejado reposar la masa 45 minutos como indicaba la receta.
Después del reposo de la masa la he repartido en porciones y he hecho los panecillos (les he dado forma) y los he dejado fermentar una hora. Hay que tener cuidado en este punto porque si no los dejas sujetos al final se expanden y no te quedan redonditos y bonitos como los de la foto del libro, te quedan más planos y anchos. Esto os lo digo por experiencia que me paso con los primeros. Lo de dejarlos sujetos no es mas que hacer unos pliegues en la tela o el papel de horno donde pongamos nuestros panes para que no tengan espacio a lo ancho para expandirse. Algo así como en esta foto.
Para los reposos largos de la masa hay que dejarla tapada con un paño húmedo en un lugar cálido. Y cuando vas a dejar fermentar el pan hay que pulverizar los panes y rebozarlos en las almendras laminadas, yo este paso me lo he saltado porque no tenía y ponerme a laminar almendras tampoco me hacía gracia.
Cuando se va terminar el tiempo de fermentación lo que hacemos es precalentar el horno a 210º. Hay que poner en el fondo agua o paños húmedos para generar vapor. Yo lo que hago es poner la bandeja del horno llena de agua. Los panes en principio hay que cocerlos sobre una baldosa, yo los primeros los hice en otra bandeja de horno, y estos los he hecho sobre un ladrillo cubierto con papel de horno. En ambos casos me han salido bien, pero reconozco que sobre el ladrillo se han hecho mejor y en los 15 minutos que indicaba la receta.
Y cuando ya están hechos los tenemos que sacar a una cesta para que se enfríen, yo los pongo en un cestillo de pan que tenemos. Cuando ya estén fríos nos los podemos comer así tal cual, pero reconozco que están muchísimo más buenos con el azúcar glas por encima.
Espero que os haya gustado y que cuando tengáis bien de tiempo los probéis.
Un besazo enorme!!!!!!!
Laura
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